Fan fic: RECUERDOS DE UN AMOR MARCADO. (Riren)

Hola, hoy les traigo este hermoso fanfic, que me dedico mi amiga Vianney Rodriguez (Ney rodriguez) la historia es sobre un alumno y su profesor, genero "Yaoi", los personajes principales son Rivaiile y Eren personajes de Shingeki no kyojin propiedad de Hajime Isayama.

Me encanto la historia, no dude en pedirle permiso a mi amiga para publicarlo y para que el mundo lo lea y lo disfrute.

RECUERDOS DE UN AMOR MARCADO.

CAPITULO I.

Reencuentro Destinado.
Autor: Ney rodriguez

Pasos acelerados era lo que se escuchaba en aquel pasillo, sin más gente que aquel joven, que se apresuraba a llegar a su primer día de clases en esta escuela, se le había hecho tarde por haber jugado videojuegos en la noche, estaba a punto de llegar a su aula hasta que escuchó una voz grave y fría que le llamaba.
-Oí, mocoso no corras por los pasillos- esté se detuvo y se giro para encarar a la persona que hablaba, observando a una persona un poco baja, pero de gran porte, vestía de saco y pantalón de vestir negro, camisa blanca , mocasines negros bien lustrados, su piel blanca como la nieve, ojos pequeños verde oliva, que fruncía el ceño, labios finos, todo en él era atractivo a su pensar; se estaba perdiendo en sus pensamientos, sacudiendo un poco la cabeza volvió a la realidad.
-D...discúlpeme...e..- quedó interrogativo.
-Profesor Levi Rivaille, mocoso tonto.
-Disculpe profesor- se encogió de hombros -soy nuevo alumno del plantel y p...pues se me hizo un poco tarde, jeje- nervioso rasco con su dedo su mejilla izquierda.
-Tonto me di cuenta, ¿Cuál es tu aula?
-La número 104- bajó la mirada.
-Ho, así que serás mi alumno, estoy a cargo de ese grupo, doy clases de idiomas y Matemáticas- comenzó a caminar delante del joven -No me gusta la impuntualidad, las tareas deben ser hechas correctamente y entregadas al día que pido sin pretextos, si tienes dificultades, pregunta tus dudas máximo dos veces- hablaba con él joven siguiendo sus pasos desde atrás, mirándolo de reojo, pues le había llamado la atención.
-S...si profesor.- bajo la mirada pues le dio miedo como hablaba su profesor frío y calculador; hasta que vio que se detuvieron en una puerta abriéndola su profesor de baja estatura que él, "diez centímetros menos" pensó que era lo que los diferenciaba.
-Buenos días, alumnos.- pasó directamente a un lado del escritorio.-Les presentó a un nuevo alumno-con su mano le hizo la señal de pasar y presentarse.
-Hola ¡mucho gusto en conocerlos! Mi nombre es Eren Jaeger, alumno de intercambio, espero nos llevemos muy bien-esbozo su mejor sonrisa, con un pequeño sonrojo en sus mejillas.
Todos quedaron maravillados por el joven, hasta el mismo profesor por aquélla acción; cosa que no le pasaba todos los días; un joven alto, delgado, piel tostada, cabello castaño rebelde, aquella sonrisa esculpida por ángeles, nariz respingada, pestañas negras largas, y esos atractivos ojos grandes de singular color aguamarina llenos de vida. No sabían que responder hasta que el profesor rompió el silencio.
-Bien, toma asiento cerca de Arlet- señaló-comenzare la clase, no quiero ninguna interrupción, escucharon.-le miro fríamente, haciendo temblar un poco al alumnado.
"Je,je, que curioso profesor" pensó Eren llegando a su lugar, observando a un chico rubio de ojos azul celeste, un poco mas bajo que él, piel blanca, portando el uniforme escolar ordenado, saludándolo con su mano, y atrás de esté una chica de rasgos asiáticos muy hermosa a su parecer, ojos rasgados color negro, piel blanca, nariz pequeña respingada, de cabellos lacios color negro azabache corto casi a los hombros, observándole detenidamente, la saludo y se sentó, comenzando así las clases.
Ponía atención a todas las clases, no se podía permitir bajar sus calificaciones, ya que el intercambio implicaba también de ello, mantenerlas. Eren provenía de Alemania, más quiso conocer más del mundo exterior a su hogar; cuando se entero que su escuela tendría un intercambio a Estados Unidos se postulo para ello, logrando ser aceptado por méritos propios, ya que su familia era de orígenes nobles, su padre gran Doctor Cardiólogo y su madre Concertista de piano. Tenía todo pero a la vez no, ya que era hijo único era sobreprotegido. Cuando sus padres se enteraron del intercambio se negaron, ya que por sus ocupaciones no podían acompañarlo, pero aceptando cuando el amigo de la familia Erwin Smith empresario Internacional Automotriz les dijo que podía cuidar de él, en aquel país, ya que por sus negocios debía mudarse una temporada allí, debiéndole una al rubio de cejas grandes. Y aquí estaba sentado tratando de resolver sus problemas matemáticos una materia difícil para él.
-Joven Jaeger, me parece que tiene dificultades, quédese después de clases- expreso su profesor con frialdad ante él. Una cosa que no le gustaba a Levi Rivaille era que cualquiera que le retrasara en sus enseñanzas, le daría a probar sus métodos estratégicos y estrictos, que no desearía quedarse atrás en clases y volver a probar sus métodos nuevamente. Así le habían dicho sus nuevos amigos Armin Arlet y Mikasa Ackerman que se acercaron al chico comenzando una gran amistad entre ellos
-Esta bien profesor- con voz temblorosa y nerviosa le contesto, ya que sentía la mirada penetrante de su profesor a cada instante.
El sonido de la campana de salida llego y todos se despidieron entre si, la chica con rasgos asiáticos y pelo negro azabache quería quedarse con Eren, pero fue jalada por el rubio de ojos celeste.
-Veo que se te dificultan las matemáticas, joven Jaeger.
-Un poco profesor Rivaille.-se encogió de hombros.
-No hago esto tan a menudo pero por tu caso haré una excepción debes mantener tu calificación, mocoso.
-E..eh.-se quedo interrogativo.
-Mocoso desde mañana te daré clases extras en tu hora libre extracurricular, como tu expediente muestra que no tomarás ninguna clase, tomaré estas enseñanzas como algo extra.
-P..pero...profesor es mi hora libre- respingo.
-No seas insolente mocoso de mierda-se exaltó
-¡No me llame así!- eso ya fue una ofensa para él, comenzó a acercarse hacia él.-Soy su alumno tiene que respetarme.-inflo sus mejillas, una vista agradable para el azabache.
-Yo te llamo como quiera, agradece que te ayudare con mi materia- se fue acercando, el rostro del chico tenía un tono rojizo en sus mejillas, una hermosa imagen, sentía algo que no podía comprender por él, como si ya lo conociera desde antes, de pronto su cerebro reaccionó, dándole una mirada rápida de sorpresa imperceptible, si era quien recordaba desde hace mucho tiempo, “es él, sin duda” pensó para sus adentros, volviendo a mirar al chico firmemente.
El castaño sentía que ya lo conocía, pero no daba de donde trato de recordar pero no lograba dar en que lugar, se percató de la distancia, nervioso retrocedió torpemente que no piso bien y sintió caerse hacia los pupitres de sus compañeros, pero antes de eso, unos fuerte brazos lo abrazaron de la cintura, atrayéndolo al poseedor de estos.
-Deberías tener mas cuidado Eren- el castaño comenzó a sentir algo extraño en su ser cuando le llamó por su nombre, se le revolvía su estomago y su corazón latía a mil por hora, "que me pasa" no lo comprendía, pero sus ojos no se apartaban de la vista de su profesor en los cuales pudo encontrar una gran soledad al observarlos.
Se sujeto de los hombros del más bajo, su rostro estaba tan cercano al de su profesor,  sintió una gran  nostalgia  cuando el azabache acercó sus finos labios a los suyos, rozándolos ligeramente dándole un casto beso que correspondió, pero su cuerpo pedía por más, moviéndose solo por mas contacto se aventuro a aprisionar esos finos labios. El azabache sorprendido se dejo llevar también, pues su cuerpo pedía sentir al chico que tenia frente de él, profundizando el beso y aventurarse a tocar el cuerpo del castaño con sus manos las deslizó en el pecho de esté,presionando sobre la ropa los pezones que se erguían por la excitación sentida. Sus respiraciones eran aceleradas, Eren coloco sus brazos por el cuello del azabache, quien siguió tocando el cuerpo que estaba a su lado. De pronto el castaño sintió una punzada en su cabeza, trayéndolerecuerdos que no entendía.
-¡...... espérame! -era él de pequeño, corría por una pradera hacia un pueblo, en su natal país.
-No te quedes atrás Eren- un chico mas grande que él se dirigía a comprar hacia el pueblo, mas no distinguía el rostro del joven.
-Hehehe, L.....te dije que podía verte hoy, mami me permitió salir al saber que estaría contigo- le miró con una gran sonrisa, sujetando la mano del contrario, quien apretó el agarre con ternura.
-Eren aun así no hagas cosas riesgosas, tengo deberes que cumplir- observo que ya llegaban -prométeme que no te apartaras de mi, siempre estarás a mi lado -le sonrió, esa sonrisa nunca la olvidaría.
-Esta bien L..... lo prometo- el joven se inclino ante él y rozo sus labios con los de él.
-Es nuestra promesa Eren- solo recordó esa sonrisa.
Estático se quedo ante aquel recuerdo, no entendía, volvió a la realidad cuando su profesor lo sentaba en el escritorio, no tenía vergüenza de lo que hacia, era como si hubiera esperado que su profesor lo tomara sin objetar. Lo miró y vio en esos ojos profundos sentimientos que el mismo estaba experimentando: cariño, devoción, ¿amor?
-Profesor Levi..¿nos conocemos de otra parte?- detuvo al azabache, quien lo observo detenidamente.
-......-
-¿Profesor?-
-Debemos irnos-se separo y comenzó a guardar sus cosas apresuradamente, paso al lado del castaño saliendo rápidamente.
-Espéreme profesor-el castaño se apresuro a su encuentro, más el azabache se detuvo llegando a la salida del plantel, donde se encontró con una persona que recordó rápidamente; cabello rubio corto bien peinado, ojos grandes color azul zafiro, tez blanca, alto, de gran porte, con un saco y pantalón de vestir color azul oscuro, camisa blanca de manga larga.
-Buenas tardes, vengo por el joven Eren Jaeger- le sonrió gentilmente.
-Y se puede saber ¿quien es usted?-apretó sus puños con recelo y odio "maldita mierda nos volvemos a encontrar" pensó para él.
-Mi nombre es Erwin Smith, el tutor del joven Jaeger.-
-Erwin-escucharon hablar al chico que llegaba detrás de Levi. -Creí que te había dicho que me iría solo-se molestó.
-Eren sabes que es peligroso, no puedes andar tu sólo.-le reprendió aquélla el rubio.
-¡Hump! Les pedí que confiaran en mí- giro su rostro para que no lo vieran
-Jaeger no hagas berrinches de bebé, vinieron por ti, se cortés-Levi le mandaba una mirada de desaprobación.
-Discúlpeme Profesor-su rostro se sonrojo, que espectáculo había hecho ante uno de sus profesores, que vergüenza.
-Eren debemos irnos- termino de hacer una llamada y en dos minutos ya estaba un auto frente a ellos, el castaño obedeció y se subió, despidiéndose de su profesor.
-Muchos gusto conocerlo Profesor....-
-Levi Rivaille, el gusto es mío.-  Los despidió, observando como el auto se perdía sacó su celular.
-¡¡Buenoooo!! ¡¡Enanín!! Ese milagro que me llamas-
-Cállate cuatro ojos- le gritó-Volví a verlo Zoé-
-Mmm...¿ a quién?- aquélla mujer preguntó incógnita, solo había una persona que haría que su amiguito le llamará primero.
-A Eren, esta aquí en Estados Unidos.-
-Noo, ¿En serio enano? O me estas engañando.-
-Pedazo de mierda yo no miento. Y además, vino con él oxigenado.
-Eeeh...Erwin también esta aquí. ¡Oh Por Dios!-Gritó.
-tsk, que escandalosa, si el idiota que me alejo de Eren también, ¿estas en tu casa?-
-Claro Enanín, date prisa, ¡la historia del siglo! Dime ¿piensas perderlo nuevamente?-preguntó.
-Estas mas loca o que, esta vez no me apartare de él, lo recuperaré.-corto la llamada, dirigiéndose a la casa de su amiga.

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